Gracias

Quiero dar las gracias a toda mi familia por apoyarme y leerse mi blog cuando era muy espeso. Cuando pensaba que no me lo leía nadie, que nadie me ponía comentarios, ellos se sabían todas mis entradas de memoria. La nota que me ponga mi profesor de Lengua y Literatura es por vosotros, ¡¡¡GRACIAS!!

Ahora sí, mi última entrada y si acaso la más nostálgica

Bueno, en esta entrada voy a comentar mi pase por el Juande, no penseís que la haré de algun modo graciosa, aunque intentaré que sea entretenida y no aburriros. También hablaré con una entrada mucho más personal mía, y sobretodo íntima. Me iré mucho del tema principal, y ya sé como lo odia Juanan, pero quiero tocar todos los puntos de los que quería hablar.
Yo llegué al Juande a los cinco años, después de pasar un tortuoso camino por el chile, en el que recuerdo casi más que mis primeros años en el Juande. El día que llegué al Juande, yo estaba muy nervioso, y cómo no, llorando. No sé por qué, cuando era pequeñito, lloraba por todo, comida, nostalgia cuando mi madre se iba y me quedaba con mi única abuela, ya que la otra no la he conocido aunque me hubiera gustado conocerla, y realmente mi abuela vale por los otros tres abuelos que debería haber tenido ya que el marido de mi abuela no cuenta, ya que recuerdo poco de él y lo poco que recuerdo, obviamente, pues es lo malo de él. Pensareis que me estoy yendo del tema, pero a ésto me refería con una entrada más personal.
El primer día del cole, entré en mi clase, muy asustado, y vi a dos chicos que se divertían con la plastilina. Adrián Alvarez Vega, de los mejores amigos que he tenido y tendré en mi vida, puedes hablar con él de cualquier cosa aunque él no quiera hablar contigo de algunas cosas. El otro era Jorge Montero, que nos distanciamos porque cada uno nos metieron en una clase distinta y ahora somos amigos, pero no tanto como deberíamos serlo. Al verlos sentados con la plastilina, yo, simplemente me senté en una silla con ellos y les pregunté si podía jugar. Ellos me preguntaron mi nombre y estuvimos bastante tiempo jugando con la plastilina. Qué fácil era la vida cuando eras pequeño, no sé por qué se complica tanto cuando creces, cuando se está mucho mejor como se estaba antes. Ahora si pides jugar con alguien, o simplemente estar con alguien,  la gente te mira raro, haciéndose prejuicios, la mayoría de las veces por el miedo a lo distinto. Y no te digo nada si te quieres sentar con alguien de sexo diferente al tuyo.  Mis días en 5 años fueron muy bonitos, además de que tenía una muy buena profesora, Ana, que aún me sigo acordando de ella y la saludo siempre que la veo, ya que una mala educación de pequeño te puede condicionar toda tu vida, y en nuestro caso fue justo lo contrario. Hicimos el festival de promoción a primaria, con conciertos de grupos famosos. A mí me tocó con Enrique Manolo Escobar. Yo tocaba la guitarra(en los ensayos la tocaba al revés) y Enrique hacía playback. Nos aplaudieron muchísimo y me sentí como alguien importante. Como éramos muchos, hicieron la división de las clases en tres grupos, A, B y el mío: C. Ésta clasificación cambió mucho, ya que nosotros, que éramos los de C, fuimos el último mono del Juande hasta este curso, aunque he dicho que iba a hablar de cosas buenas. La época de primaria fue genial, con profesores como Goyo, que nos enseñaba toda la base de estar con los ordenadores, y que yo y algunos mas también íbamos a informática y lo único que hacíamos era meternos en juegos y jugar durante esa hora. También tuvimos a Mariana, que utilizaba juegos muy competitivos para aprender y realmente aprendí muchísimo ese año,  a Don Fernando, que me encantaban sus chistes fáciles cuando de repente entraba en clase, o sus historias de pequeño, A Carlos, el mejor profesor de mates que he tenido, aunque seguro que él no pensará lo mismo que nosotros, ya que hacíamos que él nos odiase. Encima le tuvimos cuatro años. Pasamos a secundaria y nos vino Ruth de tutora, que como éramos los de C, era normal, ya que se suponía que eramos los más buenos. La verdad es que los primeros días de Ruth la recordaba un poco tímida, pero después se soltó y en ningún momento nos dejó ir por el mal camino(nos dió una charla de sexo y todo). Además, te conocimos, Juanan, y la verdad es que me encantaba como explicabas, además de la paciencia que tenías con mis trabajos absurdos de escritura, que no tenían ni pies ni cabeza. Además, también conocía a Alfredo, que explica muy bien, pero es demasiado buenazo y hace que la gente se confíe con facilidad con él, por lo que suele hablar más de la cuenta. Y ahora me veo inmerso en un mar de dudas, pensando que voy a ser de mayor. Aparte de millonario. Bueno, os deseo mucha suerte a todos, y no creo que este blog se cierre, seguiré escribiendo de vez en cuando.

¿Mi última entrada y es una crítica de una peli? ¿Qué raro, no?

Dejemos los momentos nostálgicos y pasemos a la acción. X-men: Orígenes. La ví ayer con mi primo y unos amigos de natación. La verdad es que era una quedada con todos los de natación, pero empezó a faltar gente, y las chicas, que solo iban a ir dos, no venían porque iban a estar solas. Una de ellas me comentó que la entendiese, que si yo iría si fuesen todo chicas y yo, y yo, sin dudarlo, le comenté que me encantaría ir y que si podríais preparar una quedada así. Bueno, al final vino mi primo, Lorenzo, Luis(el chico más loco de la natación y contándome a mí, de repente se le va la olla y te cuenta fábulas inventadas por él mismo pero sin moraleja ni significado moral) y yo. Cuando nos metimos en el cine, nos dimos cuenta que al lado de donde nos sentábamos, había unas chicas de nuestra edad. Al verlo, como sabemos que mi primo es muy tímido con las chicas, nos pusimos de tal forma de que él se sentase al lado de las chicas, y él, se quedó mirando el sitio. Lorenzo, tan amigable él, le dijo EN VOZ ALTA: ¡adri, te toca ligar! Las chicas se rieron y mi primo se sonrojó y se sentó en la parte de Lorenzo, es decir, donde no estaban las chicas pero no habíamos pagado por ese asiento. Supongo que mi primo rezó porque no viniese alguien que lo hubiese comprado, porque la verdad es que no vino nadie.Válgame la redundancia. Empezó la película tras 17 minutos de anuncios y trailers, la gente ya tenía pensado irse. Lo sé porque sé leer la mente, por lo que debería salir en la peli. Después de este paridón, comienzo con mi crítica sobre la película. La película trata sobre los X-men, eso esta claro, y de cómo se llegaron a formar. Comienza con un Magneto chiquitín pero que le separan de sus padres por los campos de concentración y él rompe la verja con sus poderes ultrasuperespeciales. Le obligan a hacer pruebas y matan a su madre. Luego ese tema es lo que le marcará durante toda su vida y será un parado reprimido que solo se divierte matando y moviendo metales en vez de tener amigos y hacer algo en claro en tu vida. Bueno, la película continua con un Profesor X niño conociendo a Mística, y si sigo así os cuento la película entera. La verdad es que esta muy bien, me parece bastante buena, y espero que salgan más secuelas de los X-Men, ya que no esta nada mal y los efecto especiales son muy buenos. Lo malo es que deja muchas cosas por resolver y tiene algunos gazapos, pero por lo demás no esta nada mal. Después comimos en el MacDonald, me cogí 20 nuggets para llevar y nos fuimos a casa. Al final no estuvo tan mal.
Por cierto, he estado pensando que ya que habéis contado la historia de vuestro pase por el Juande, yo también la contaré, así que ¡¡haré otra entrada!!

Acaba el curso

No se que pensar sobre esta entrada. Por una parte, me alegro enormemente por haberme quitado el estrés de todo el año y descansar por fin en paz sin estudiar. Por otro lado, como la mayoría de la gente que conozco, también me da pena dejar el colegio Juan de Valdés después de estar más de diez años en él. Supongo que esto es solo una etapa de mi vida, pero también creo que esta es de las etapas más divertidas y amenas de mi vida, por lo que quiero terminar al máximo, además de, por lo menos, entrar en el festival. Eso no sería por mí, sino por Javier Dominguez, que no sé si al final me dejará entrar en su grupo de acrosport por él, ya que no le hace mucha gracia actuar delante de tantos. A mí, sinceramente, me da exactamente igual actuar ante tantos, total, la mayoría no los veré más y lo importante es pasárselo muy bien. (Este es el pretexto por el que he hecho cosas tan estúpidas como por ejemplo, subir y bajar varias veces seguidas en el Reina Sofía haciendo ruidos tontos, poniendo caras raras a la gente y subiendo y bajando los brazos, o hacer marcha en el Retiro, o dar a la gente con un dedo y decir: ahora eres gay. Todo eso también tiene mucha culpa un amigo mío que está igual o más loco que yo llamado Alejandro García.) Pero me he desviado demasiado del tema. Si Javi se arrepiente de su decisión, aunque sea me paso por el escenario de espontáneo con un triángulo en la mano y tocándolo efusivamente. Después de eso, iremos a la excursión de fin de curso, que todavía no se con quien ponerme, darme ideas. Un chapuzón y me veré en otra etapa, mucho más dura, en el Instituto Las Musas. Por lo menos la mayoría ha entrado y podremos vernos allí, además de que conozco bastante gente allí, aunque tendré que esforzarme mucho más de lo que me estoy esforzando ahora. Pero no quiero hablar de eso ahora que me estoy estresando más de la cuenta. Sinceramente, el año que viene, o incluso el siguiente año, vendré a veros(profesores), porque por mucho que nos quejemos de ellos, la verdad es que os habéis portado muy bien con nosotros. ¡¡¡¡¡GRACIAS!!!!!